La gran movilización de hinchas de Estudiantes a esta ciudad se vio empañada en parte por la agresión que sufrieron los simpatizantes que viajaron desde La Plata en dos micros por parte de la policía, que además les impidió llegar a presenciar el cotejo.Los simpatizantes albirrojos dieron otra muestra de apoyo incondicional para el equipo, que venía de perder ante Independiente, por la Copa Sudamericana, cuatro días atrás. Y completaron 3000 lugares de los 3500 que le otorgó la gente Canalla en el Estadio.Con mucho color y desde hora temprana, el público albirrojo se fue acercando al Gigante de Arroyito, a tal punto que a veinte minutos de comenzar el juego la porción de cabecera que los albergaría quedó chica y los simpatizantes estaban muy apretados.Ante este hecho, la gente afectada a la organización del público decidió abrir las puertas para que los hinchas puedan ocupar un rincón de la tribuna inferior del Estadio, con un cordón policial de por medio.En tanto, un grupo de hinchas albirrojos no llegó a presenciar el partido. Es que a cinco cuadras del Estadio los dos micros en que viajaron fueron parados por la policía y "golpeados salvajamente" por los uniformados según relataron testigos del hecho.
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