- ¿Por qué estaba tan convencido de que al marcar luego iban a venir más goles?
Yo sabía que en algún momento el arco se abre. Pero pasa mucho por la tranquilidad que uno tenga y también porque el equipo lo apoya. Los compañeros, cuando las cosas no salen y no podés convertir, están al pie del cañón. Y a la hora de jugar para mí esto es muy importante.
- Cuando suceden este tipo de situaciones, ¿la ansiedad va en aumento y se empieza a dudar más?
No, dudar nunca. Pero la ansiedad sí. Quizá cuando tenés una situación de gol, por querés meterla de cualquier forma tal vez te apurás o hacés algo que quizá no tenés pensado. Por eso digo que es muy importante el apoyo tanto de mis compañeros como del técnico, ya que si hubiese sido otra la situación tal vez a uno le hubiera costado un poco más.
- Después de convertir el primer gol y cuando García le tapó el mano a mano, ¿pensó que podía tener otra noche como las anteriores?
No, porque yo digo eso cuando termina el partido. De lo contrario trato de buscar el gol hasta el último minuto. Está claro que uno quiere arrancar el partido y la primera opción que tiene, convertirla. Pero lo importante, más allá de lo personal, era ganar porque era un partido fundamental y había que quedarse con los tres puntos.
- ¿Cuánto mérito tiene el entrenador en este rendimiento?
En realidad todos lo tienen. Desde el técnico pasando por mis compañeros y hasta la gente misma. Porque tal vez en otro caso se hubiera puesto impaciente y la verdad que siempre me apoyaron y todos los mensajes que recibía eran en ese sentido. Ellos me decían que en algún momento la racha iba a cambiar y así fue. Esto se lo debo a toda esa gente.
- Fueron tres goles en un partido, ¿a cuánto aspira a marcar en este semestre?
No me pongo un objetivo con los goles. Ahora quiero convertir el domingo, darle al equipo lo que le puedo aportar y seguir con esta misma mentalidad.
- Ya no pueden resignar más puntos en el torneo local, ¿este triunfo les da una tranquilidad extra para encarar el partido con Racing?
Tranquilidad te puede dar en la Copa porque ganamos otro partido de local y nos queda el de Cruzeiro, que es el objetivo. Pero en el campeonato no tenemos ninguna tranquilidad, porque no estamos bien posicionados y este club tiene que estar mucho más arriba de lo que lo está. Es un partido importantísimo el de mañana.
- ¿Tiene que ver el hecho que si pierden quedan últimos y no es lindo estar en esa situación?
Claro, por eso digo que este también es un partido definitorio, al igual que el que jugamos ante Quito. No queda otra que ganar y por sobre todas las cosas mantener la misma actitud que tuvimos, que es la que nos llevará a conseguir buenos resultados.
- En la Copa estaban presionados porque de no ganar se quedaban afuera, ¿es la misma presión que tendrán ante Racing?
No, presionados no estábamos porque este club siempre te obliga a ganar y a estar peleando todo lo que juega. No nos merecemos estar en el lugar que estamos en la tabla, por eso hay que salir a jugar con todo, no regalar nada y tener la misma actitud del jueves desde el inicio.
- ¿Es más conveniente que enfrenten a un rival que está necesitado como ustedes y que seguramente arriesgará un poco más?
Pero Racing no saldrá a arriesgarse. Saldrá a buscar un resultado porque sabe que no le será fácil jugar en La Plata. La verdad, dudo que nos vengan a atacar.
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